Aunque los juegos de la Play3, la PSP Vita o la Xbox 360 están muy bien, a veces nos da el avenate retro y nos ponemos a jugar a eso que se llamaba «aventura conversacional» y que si tienes menos de 20 años probablemente ni te suene. En esa época en la que los ordenadores apenas tenían gráficos, las aventuras conversacionales eran las reinas de la diversión informática. Si ya os contamos que los primeros se jugaban con cintas de cassette… ¿cómo os quedáis?
Se trata de juegos en los que el usuario tenía que completar una misión y para hacerlo, tenía que marcar al ordenador las órdenes por medio de comandos. Por ejemplo, «coger llave», «usar llave», «ir al norte«… Si estaba dentro de la programación, la acción se ejecutaba, si no, tenías que seguir probando combinaciones para completar el juego. Aunque parezca aburrido – vale, no es el Uncharted, ya lo sabemos – lo cierto es que estos juegos tuvieron una gran aceptación entre los jugones de la época.
Algunos de estos juegos contaban con gráficos muy básicos que nos inspiraban los escenarios e incluso los enemigos. Otros ni siquiera eso, eran simple código. Con la llegada de los ordenadores más avanzados, los monitores a color y, sobre todo, las videoconsolas, las aventuras conversacionales llegaron a su ocaso. Sin embargo, en España se ha mantenido una comunidad bastante activa que ha creado el Club de Aventuras AD, donde puedes descargar emuladores, aventuras y programas de creación.
Si te vez capaz de programar una siguiendo un sencillo tutorial que hay en la web, puedes compartirla con los usuarios e incluso participar en alguno de los concursos que se organizan por la red. La verdad es que una vez que te inicias en el mundo de la programación de aventuras no podrás parar. ¿Te animas?