Cuando hablo de desproporción me refiero a cosas como esta. No os puedo quitar la razón si pensáis que esta imagen es muy dulce, que un bebé en un lavabo es súper encantador, pero os habéis dado cuenta del tamaño del melón que tiene ese niño en comparación a su cuerpo.
Pero que pedazo de cabezón rubito…
Vía: It’s Knuttz