Druva, una empresa líder en resiliencia de datos y ciberseguridad, ha dado un paso significativo hacia la innovación al integrar un asistente de inteligencia artificial llamado Dru en su plataforma de protección de datos. Este desarrollo busca transformar la interacción de los usuarios con la tecnología, al permitir consultas en lenguaje natural que simplifican la gestión y el análisis de datos.
Dru es capaz de sostener conversaciones fluidas con los usuarios para llevar a cabo tareas como localizar inconsistencias, programar copias de seguridad y fortalecer la seguridad del sistema. Asimismo, el asistente proporciona respuestas inteligentes y facilita enlaces a la documentación pertinente de Druva, lo que ayuda en la capacitación y resolución de problemas de los usuarios.
Este avance ha sido posible gracias a la alianza con Amazon Bedrock, una potente herramienta de Amazon Web Services que permite manejar consultas en lenguaje natural y devolver datos tabulares como respuesta. No obstante, la implementación de esta tecnología no fue sencilla. Druva enfrentó desafíos como la lentitud en las respuestas del asistente de IA y complicaciones en sus ciclos de razonamiento. Para solventar estos inconvenientes, Druva empleó un enfoque de encadenamiento de tareas, lo que optimizó la velocidad y precisión de las respuestas.
Uno de los mayores retos consistió en identificar la ruta API adecuada para responder las preguntas de los usuarios. La solución a este problema se encontró al abordarlo como un desafío de clasificación. Además, el proceso de generación y llamada de API privadas se dividió en dos pasos para mejorar su robustez y reducir errores al interpretar los parámetros de las API.
La funcionalidad de Dru se extiende a tareas rutinarias como la creación de políticas de respaldo o la navegación personalizada de sitios web a través de comandos conversacionales. Esta capacidad ofrece a los administradores una operación más simplificada y accesible, respaldada por un sistema de control de acceso basado en roles.
Los resultados obtenidos han sido notables, con una tasa de precisión del 100% en la identificación de rutas de API y la generación de llamadas de API privadas, y un 90% en la transformación de datos mediante código Python. Estos niveles de precisión demuestran la eficacia y robustez de la solución, permitiendo a Druva mejorar la experiencia del usuario y expandir sus servicios.
Druva planea continuar ampliando esta solución para integrar un mayor número de API y enriquecer aún más la interacción de los usuarios con sus productos, afianzando su posición como un líder innovador en el ámbito de la ciberseguridad y la gestión de datos.
