Esta imagen seguro que a más de uno os acaba mareando aunque no creo que la vayamos a encontrar en la vida real porque entonces sí que ir a un psicólogo va a ser algo imprescindible en nuestra vida para no acabar loco como este de la imagen.
En la misma podemos ver a dos hombres, un diván y una pared pintada en color verde con óvalos en marrón que, cuando lees el mensaje, te recuerdan a los granos de café que puedes comprar en las tiendas. Es allí, en la consulta de ese médico, donde puedes darte cuenta, de que el café puede ser adictivo, si no que se lo pregunten al médico.
El hombre tumbado sobre el diván le dice al médico que en ocasiones es como si las paredes se movieran, justo lo que nos hacen a nosotros. Claro que, la respuesta del médico, es quizás lo más raro cuando le pregunta si bebe café.
Ya sabemos que el café sirve para ponernos un poco más activos y nos da energía pero en mucha cantidad nos pone nerviosos y puede jugarnos malas pasadas por los temblores cuando nos falta dosis de cafeína. Sin embargo, en este caso, y seas o no bebedor de café, ¿no se te mueven a ti también las «paredes» de la imagen?
Se trata de un efecto óptico que se consigue principalmente con el color verde y el marrón donde nos parece que las paredes se están moviendo o temblando mientras las miramos para volverse a quedar quietas al dejar de hacerlo.
Lo divertido es el chiste porque, si el doctor no ve ese cambio, ¿no puede ser porque se acostumbró o ya se volvió loco del todo? Seguro que hay algo entre ese dibujo de lo que podemos sacar conclusión: todos estamos locos.
Vía: Mighty Optical Illusions