Esta es otra de esas fotografías tomadas en el momento justo, y la verdad que la composición, además de ser curiosa y bizarra, es súper impactante (sólo me ha faltado decir, súper impactante de la muerte, o sea, te cagas 😉 )
Por cierto, con el calor que hace, ese vinito con su buena gaseosa… son las 10 de la noche y por aquí hace un calor asquerosito, así que creo que me voy a poner a estamparme botellas en la cabeza yo también… eso si, botellas bien frías.