La noticia ha impactado a los millones de seguidores que la serie Glee tiene en el mundo. Cory Monteith, uno de los principales protagonistas de la misma fue hallado sin vida ayer sábado en la habitación de un hotel en Vancouver, Canadá, aunque los medios de comunicación han anunciado que no se conocen hasta el momento las causas del deceso.
Por lo que se sabe, la muerte del actor de apenas 31 años, no tuvo en principio absolutamente nada que ver con un hecho de violencia, ya que no había rastros de alguna actividad de este tipo en la habitación. Justamente eso es lo que ha hecho que muchos de los especialistas en el mundo de la farándula de Hollywood apunten directamente a las drogas.
Hay que recordar, en este sentido, que el pasado mes de abril, Monteith había participado voluntariamente de un programa de rehabilitación, al que también había tenido que someterse cuando tenía 19. Sin embargo, sus amigos más cercanos han señalado que parecía recuperado últimamente y que aún no podía creer lo sucedido.
Monteith, que fuera encontrado en el piso 21 del hotel Fairmont Pacific Rim, donde se había alojado la última semana, había nacido el 11 de mayo de 1982 en Calgary, Canadá. A pesar de una adolescencia bastante traumática, con decenas de cambios de escuela y el abandono final del secundario, había logrado mostrar toda su valía como actor, hasta convertirse en una de las sensaciones de esta serie juvenil.
El joven, que anteriormente se había desempeñado como techista, taxista, conductor de micros escolares y empleado de supermercado, hasta que Glee se cruzó en su camino, interpretaba en la serie a Finn Hudson, un carismático estudiante que destaca sobre todo por su desempeño en el equipo de fútbol americano de la universidad. Ahora, el mundo de las series no deja de llorarlo.
