Todo el mundo se pregunta qué ocurre en las noches «campuseras», qué misterios esconde la solitaria y calurosa nocturnidad valenciana. Y es que, como en cualquier selva, la noche campusera puede ser radicalmente distinta a la actividad diurna.
La sorpresa me le he llevado yo cuando al pasar por una de las zonas de la Campus Party, me encuentro a un grupo de personas desarrollando una actividad de dudosa legalidad.
Está claro que la Campus Party no es sólo jugar, descargar y conferencias, sin duda la gente se suma a cualquier actividad social y nuestros amigos campuseros nos dan unos minutos muy buenos.
PD: En el vídeo falta una «s» en deportes (Lamentamos tener hambre y comernos una letra, es lo que tiene editar vídeo a las 6 de la madrugada 😛 )