No soy muy bueno con el refranero español (a pájaro en mano no le mires el diente…) pero creo que había uno que era:
Si mi sangre fuera tinta
Y mi corazón tintero,
Con la sangre de mis venas
Te escribiría te quiero.
Pues ahora va a dejar de ser un refrán para ser una realidad gracias a Bob Partington, que con un poco de imaginación, una jeringuilla con sangre y una pluma estilográfica con un par de arreglos ha creado un aparato para poder escribir con sangre.
Así no parece gran cosa, pero si vemos el vídeo la verdad que da un poquito de grima.
Vía: River