¿Problemas de dientes?

Teething problems

Hay que reconocer que uno de los médicos a los que más miedo le tenemos es al dentista. Creo que eso es porque el dentista lo vemos desde pequeños y sabes que, cuando vas, te va a decir que has comido demasiado dulce, que tienes picada alguna muela o que hay algo mal en tus dientes.

Aparte, no es ya solo el paso de tener que ir y mantener la boca abierta, esperar que te «cure» con sus herramientas, etc. sino también el sablazo que supone la factura después porque no me dirás que son baratos porque no lo son, quizás si tienes contacto puedes tener alguna rebaja pero muchas veces es complicado (de ahí que algunos quieran casarse con dentistas).

En la foto vemos un dentista y, no se tú, pero yo adoro a la mía después de ver a este. Si, hace daño, molesta, duele, lloras cuando tienes que pagar la factura pero estoy más que segura que cualquiera de nosotros preferirá a su dentista antes que ponerse en manos de este otro dentista que asustaría a cualquiera con los métodos que tiene para ocuparse de los problemas de dientes.

Y es que uno no creo que se deje tocar por alguien que usa semejantes cosas para aliviar el dolor de muelas. Más que nada porque no se yo si eso será un alivio o una tortura mayor (bueno, piensa que si te desmayas ya no vas a tener dolor, no sentirás nada y a lo mejor así el médico trabajo de forma más rápida, eso o te despierta con otro ramalazo de dolor que también puede ser).

Sea como sea, no creo que a nadie le gustara ir a esta consulta. ¿O hay alguien a quien le guste el dolor?

Vía: Nothing to do with Arbroath

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