Como supongo que sabrás, los restaurantes, a menudo, tienes unas normas o un mínimo de etiqueta para poder entrar y respetar mientras se está en el mismo.
Sin embargo, también es cierto que no todos los restaurantes son iguales y que a veces nos encontramos con cosas sorprendentes o, cuanto menos curiosas.
Por ejemplo:
Restaurante Olivers de Valencia. En este restaurante no te hace falta ir de etiqueta, más que nada porque es un restaurante en el que vas a ir desnudo si quieres entrar y comer allí. Lo que ya no se es si los trabajadores también irán desnudos.
Restaurante Victoria & Albert’s del hotel Grand Floridian Resort & Spa, en Disney. Si, así es, en un parque de atracciones dedicado a los niños hay un restaurante donde no pueden entrar menores de 10 años.
Café Kashiwa Mystery, al sur de Japón. Un restaurante donde no comes lo que pides sino lo que el anterior cliente ha pedido. Te ponemos un ejemplo: entra un hombre y pide una tostada. Él no se come esa tostada sino lo que haya pedido la otra persona pero sí que la paga; después entras tú y pides un café. Pues bien, lo que tú tomas no es el café sino la tostada de ese otro hombre que ha entrado antes que tú.
Surry Hills, un restaurante de comida japonesa donde, si no te comes todo lo del plato, te ponen una multa (si lo haces hay un descuento del 30%).
Vía: Vavel