Quién no se acuerda de la sonrisa de Loreto Valverde. Estridente, tronchante y con unos alaridos que hacían perder todo el glamur que la presentadora pudiera tener. Bueno, pues aquí os dejo a otra moza de buen ver que le ocurre exactamente lo mismo. Su sonrisa es ridícula, pero por lo menos te hace pasar un buen rato.
Y me pregunto yo, tan difícil es controlar la risa, o cambiar el estilo de risa.
Vía: Yonkis