Los ingenieros de Ford, una de las más importantes empresas automotrices del mundo, han presentado en las últimas horas una nueva tecnología que promete cambiar la concepción de los automóviles, basada en la utilización de la nueva tecnología de fibra de carbono para algunas de las piezas centrales de los vehículos, que permitirán de este modo reducir notablemente el peso de los mismos, lo que sería una enorme ventaja en muchos casos.
Lo cierto del caso es que las primeras pruebas de utilización de estas fibras de carbono se han realizado concretamente sobre el capó de los vehículos, ya que es la parte más fácil de reemplazar por encontrarse al descubierto, y al reducirse el peso final de los automóviles, los expertos consideran que el consumo de combustible también podría ser bastante menor, pues el motor no realizaría un esfuerzo tan grande.
Esta interesante novedad, que fue presentada en Alemania, y más en concreto en el encuentro “Composites Europe” de Dusseldorf, es una de las tantas que en los últimos tiempos han buscado generar nuevos automóviles, más eficaces que los conocidos hasta ahora, mediante aplicación de nuevos procesos que abogan por la utilización de materiales hasta ahora inéditos en esta industria, como éste.
En este sentido, quien se manifestó ante la prensa fue la propia ingeniera de investigación de procesos y materiales avanzados del Centro de Investigación Europeo de Ford, Inga Wehmeyer, quien sostuvo ante los medios que la posibilidad de disminuir el peso de los coches sería realmente espectacular para todos los que se desarrollan en este mercado, e incluso para los costos finales de los usuarios.
Por eso mismo, y considerando que hasta ahora nunca antes se había utilizado un capó de fibra de carbono, y que éstos pesan menos de la mitad del mismo elemento de acero, se considera que en algún futuro no muy lejano, el peso de los automóviles podría reducirse entre un 20% y un 40% con la utilización de estos modelos de fibras livianas.
