Seguro que en más de una ocasión te han reñido en casa cuando te has hecho un bol de apetitosas palomitas de maíz. ¡Que son porquerías! ¡Que engordan! ¡Cómete mejor una manzana! Pues ahora, todos esos argumentos no sirven. Porque un estudio de la Sociedad Americana de Química ha revelado que el maíz inflado tiene más concentración de antioxidantes que las frutas, los vegetales y los frutos secos.Vamos, que son más sanas.
Según el estudio, los niveles de polifenoles (agentes antioxidantes) de las palomitas de maíz son similares a los de las nueces. Y son casi el doble de los que se encuentran en la misma ración de fruta. Lo peor de la noticia es que estas propiedades antioxidantes no se encuentran en la parte rica de la palomita, sino en la cascarilla marrón que se nos queda entre los dientes en el cine. Es ahí donde está la mayor concentración de fibra y antioxidantes.
Sus propiedades benéficas son muy altas porque este alimento se come sin procesar, por lo que están más concentradas. Sin embargo, hay que vigilar un detalle: no se le pueden añadir grasas insanas, azúcar o mucha sal. Así que las palomitas dulces no sirven, ¿ehn? Tampoco son del todo buenas os paquetes de palomitas para microondas. Lo mejor es hacerlas en la sartén, con un poquito de aceite de oliva, o una palomitera con aire caliente.
Eso sí, no se te ocurra hacer lo que estos chavales: explotar las palomitas con las ondas de su teléfono móvil. Aunque el vídeo es alucinante, no es una manera correcta de hacerlas.
http://www.youtube.com/watch?v=BH2lMO-wIhY