Los chistes de locos suelen ser muy recurridos. Aquí va uno:
Se escapa un loco del recinto de seguridad y se va corriendo hacia un lago y se tira al agua, sin saber nadar. El director del manicomio empieza a temblar, sabiendo que poco se puede hacer por la vida de ese pobre hombre.
De repente, y para sorpresa de todos, otro loco sale corriendo, llega al lago y rescata a su compañero de ahogarse.
Llegada la tarde, el director del manicomio visita la celda del salvador y le dice «Jose, tengo que agradecerte lo que hiciste esta tarde salvando a tu compañero, pero desgraciadamente de poco sirvió, ya que esta tarde apareció ahorcado en un árbol».
Jose responde: «Ah! No, si fui yo, que lo tendí a secar al Sol«.
Vía: Mail